domingo, 29 de septiembre de 2019

El reto de la abundancia

A finales de Febrero mi amiga Bren me invito a un reto de abundancia, 90 días de decretos, un poco de coco wash y bendiciones al por mayor. Se trataba de trabajo con uno mismo. La verdad es que comencé la aventura pensando en Antonio y como podría ayudarle en su negocio. Lo que comenzó pensando en el otro se convirtió en un cambio total en mi vida. Uno de los decretos era el de merecimiento. Había una parte que me hacía llorar decía algo así "Merezco un buen amor" y después describía cosas maravillosas de lo que yo merecía. Lloré varios días mientras lo leía, siempre lo hacía por la mañana, hasta que una mañana que estaba lloviendo, salí y grite al cielo que ya no podía más con ese amor que no era el que yo merecía, que dejaba esa carga en ese momento. A partir de ese instante mi vida cambio. El dinero comenzó a rendirme y empecé a invertir en mi salud. Y después de 10 años de luchar con el sobrepeso, casi sin sentirlo, el ejercicio y la alimentación sana comenzaron a funcionar. Finalmente al día de hoy he perdido 15 kilos, aun me faltan 10 pero se que alcanzare la meta. Además gane la apuesta con mis hermanos y papás, ¿se acuerdan?, cada uno de ellos me debe $1,000.


En el amor, me libere, deje que las cosas fluyeran y aunque me costo 2 meses más convencerme, finalmente hable con Antonio y después de 10 años de estar con alguien que no me amaba ( y nunca lo hizo) él se fue, el 9 de mayo. Su partida me dio tranquilidad. Me enamore de mi. Ahora entiendo que no soy perfecta, pero quien me ame, amara todas mis imperfecciones. 
El reto termino y han pasado ya 5 meses, las cosas no me han salido tan bien últimamente, la caída a pesar de todo, resulto ser una bendición porque con las radiografías que me tomaron, encontraron que mis rodillas han sufrido mucho después de 10 años de sobrepeso, así que por salud debo bajar los 10 kilos que faltan. No puedo hacer ejercicio, sólo natación, así que a partir de la siguiente semana comenzare a nadar 4 días a la semana. También me encontraron una bolita que me asusto mucho porque podía ser maligna. Afortunadamente no es así, solo es de grasa y aunque por el momento no hay que operarla debemos esperar a ver que sucede, la tengo en el hombro izquierdo así que casi no se ve. 
A pesar de todo esto, debo decir que me siento lista para comenzar mi propio grupo de abundancia, el martes comenzaré, es una responsabilidad, pero se que me hará muy bien retomar todas esas enseñanzas y transmitirlas a otros. Hasta aquí me quedo hoy, bye.